¿Cuál es la mejor temperatura ambiente para tu hogar?

Una semana más, compartimos los mejores consejos para tu hogar en el blog de Vela Ventana, empresa experta en el aislamiento de ventanas. Hoy queremos hablaros sobre cuál es la mejor temperatura ambiente para tu hogar, cómo evitar pérdidas y mejorar la temperatura, y sobre nuestro sistema de aislamiento térmico para ventanas.

La mejor temperatura ambiente para tu hogar

Si has llegado hasta aquí, es porque te interesa cuál es la mejor temperatura ambiente para tu hogar. Para vivir en un lugar confortable, es vital tener la temperatura ambiente ideal en nuestro hogar. Es complicado determinar la temperatura media ideal para nuestro hogar, pero contando con los momentos en reposo y en actividad del ser humano, esta temperatura puede oscilar entre los 18 y 20 grados. Como ya os decimos, esta temperatura puede variar según el comportamiento del cuerpo de cada uno o incluso de la estación en la que nos encontramos.

¿Cómo evitar pérdidas de temperatura en nuestro hogar?

Si quieres mejorar tu vivienda, así como tener la mejor temperatura ambiente en tu hogar, te recomendamos siempre ventilar un poco tu hogar todos los días, de cara a refrescarlo y renovar el aire, y de paso evitar humedad en una vivienda.

Otro consejo sería la incorporación de plantas a la decoración de nuestro hogar, de cara a que haya aire limpio durante el día en la casa.

Tu solución: sistema de aislamiento térmico de ventanas en tu hogar

En Vela Ventanas somos conscientes de este problema, por ello ponemos a tu disposición nuestro servicio de cambiar ventanas en Sevilla y alrededores e instalarte el mejor sistema de aislamiento en ventanas, en este caso, para mejorar tu aislamiento térmico en el hogar. Además de las ventanas, también es importante disponer de un buen sistema de aislamiento en puertas.

Con nuestros consejos y los servicios que podemos ofrecerte en Vela Ventanas, seguro que consigues la mejor temperatura ambiente para tu hogar y dices adiós para siempre a las humedades y a las temperaturas desagradables como el frío propio del invierno.